El tiramisú es un postre moderno, no tradicional. Tiene su origen en la parte este del Norte de Italia, en la región del Veneto (cuya capital es Venecia) y en los años cincuenta. Algunas fuentes concretan en los burdeles de la región su localización exacta de creación. Arturo Filippini, presidente de la cadena de restaurantes Toulá, ha admitido: “Había sido efectivamente después de la guerra cuando nos íbamos con amigos a los burdeles de Treviso..., en esos tiempos tenían también cocinero... La maîtresse, a los clientes aficionados (pero también a las mujeres) les ofrecía un dulce diciendo con cortesía estas palabras emblemáticas: Anda, toma cariño, que te doy una cosa que "te tira su"...”

La expresión "te tira su", en lengua veneta, y también en la lengua italiana, podría ser el equivalente en español del "tentempié", pero no tanto a la manera de un aperitivo, pues el tiramisú como dulce es mucho más fortalecedor y de inmediato efecto gracias a la cantidad de glúcidos que incorpora.

En principio, no lleva ni queso Mascarpone, ni nata u otras grasas similares, porque todos esos lípidos no hacen más que tener un peso en el estómago y ralentizar la digestión, con el resultado de obtener el efecto contrario, es decir, crear cansancio y somnolencia.

En 1968 el tiramisú artesanal de Alfredo Beltrame (maestro de la hostelería veneta y fundador de una cadena de restaurantes con sede en la ciudad de Treviso, en el Veneto) llega oficialmente a la cadena de los restaurantes Toulá. Así fue sacado de la intimidad de los prostíbulos y presentado al exterior para conseguir un gran éxito popular.

Entre los años setenta y ochenta, la receta utilizada en el restaurante Toulá de Milán utilizaba cinco ingredientes, huevos y azúcar batidos, bizcochos Savoiardi mojados en café expresso y cacao en polvo.

Ingredientes
–1 bote de queso mascarpone
–2 huevos
–100 gr azúcar glass
–1 copita de coñac
–Cacao en polvo
–24 bizcochos de soletilla
–1 cucharada de café soluble
–4 cucharadas azúcar
–1 y 1/2 vaso de agua

Preparación
Preparar café disolviendo el café soluble con el azúcar y el vaso de agua.

Mezclar las dos yemas de huevo con el azúcar, después verter el queso mascarpone y el coñac (lo normal es utilizar Amaretto, pero a mí me gusta más el coñac) y mezclar hasta que quede una crema suave, teniendo mucho cuidado de que no se licue, sino la crema estará perdida e irrecuperable.

Montar las claras a punto de nieve y añadirla a la crema anterior.

Poner una capa de bizcochos en la base del molde y regarlos con café hasta que estén empapados, después extender parte de la crema y espolvorear un poco de cacao en polvo por encima. Poner otra capa de bizcocho y otra de crema, así sucesivamente hasta que se acaben los bizcochos y la crema.


3 Comments:

  1. Monaguillo said...
    ummmmm pues yo no conocia la historia del tiramisu... asique muchas gracias....!!
    Si esque sois la leche... ademas de hacer platazos ( todavia sigo pasmado mirando la foto) nos poneis la cultura en bandeja y "remojada en cafe" ....

    ciaooooo y mil gracias!
    Gema said...
    Cualquier comentario es bienvenido, pero de alguien como tú alaga aun más :). Qué tal el frío por Salamanca?
    Monaguillo said...
    anda anda, no sera pa tanto... jajaja

    pues poco a poco nos vamos recuperando..... pero todavia esta mañana me ha tocao hacer el pingüino para llegar al curro.....!!!
    No veas lo que pude caer ayer...nunca habia visto quitanieves por el centro de salamanca..... y yo con la calefaccion rota en casa.... jajaja

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